- Haber escrito en verano una carta informativa sobre cómo afectaban las nuevas instrucciones a nuestro centro en particular (12 profesores menos, ningún desdoble de lengua y matemáticas, cierre de la biblioteca, desaparición de la compensatoria, menos profesores por guardia, laboratorios cerrados,...) y haberla colgado en la valla del instituto.
- Haber otorgado una autorización tácita para la instalación-protesta por parte de los profsores en el patio del IES.
“Los logros de una civilización como la nuestra, basada en el pensamiento crítico, en el derecho y la seguridad jurídica y en la conciencia de la dignidad del hombre, son tan espectaculares como frágiles. Porque si uno de los tres pilares falla, toda la estructura de nuestra civilización se tambalea y con ella, por supuesto, se tambalea nuestra libertad.”
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Cuando al director de un centro educativo le expedientan por decir la verdad y por facilitar la libertad de expresión de sus profesores, parece que algo se tambalea.
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